Camilo Hurtado (CH): Bienvenidos a su podcast Hacia Dónde Vamos. Desde este momento nos tomamos unos minutos para mirar hacia el mañana y para saber y comprender cómo será nuestro futuro. Bienvenidos.
Los saluda Camilo Hurtado y les doy la bienvenida a este episodio especial de nuestro podcast, donde exploraremos un tema que está redefiniendo el futuro del sector financiero. Es exactamente el tema de las finanzas sostenibles en América Latina. En los últimos años, la sostenibilidad ha dejado de ser una cuestión de responsabilidad corporativa para convertirse en un pilar fundamental del crecimiento económico.
A nivel mundial, los activos gestionados bajo criterios ASG, es decir, ambientales, sociales y de gobierno corporativo, superaron los 40 billones de dólares para 2030. Cabe precisar que en los mercados no estadounidenses, los activos de inversión sostenibles bajo gestión, conocidos como AUM, han aumentado un 20% desde 2020, mostrando una clara tendencia hacia inversiones que promuevan un impacto positivo en el mundo. En América Latina, una región crucial, debido a su riqueza natural, las finanzas sostenibles están tomando cada vez mayor protagonismo.
En ¿Hacia Dónde Vamos? traemos a los que saben. Es por ello que saludamos a Daniel Gracian, quien lidera la labor de financiamiento sostenible de Scotiabank en Latinoamérica y el Caribe, trabajando con una amplia gama de clientes en los mercados del banco para ofrecer acceso a distintos productos y servicios de este ámbito. Esto incluye asesoría y soluciones que buscan aprovechar las oportunidades, reducir el riesgo y alinear el financiamiento y la inversión de los clientes con su estrategia y objetivos de sostenibilidad.
Daniel representa también a Scotiabank en el flujo de trabajo dedicado a la movilización de capital hacia economías emergentes y en desarrollo de la Alianza Financiera de Glasgow para las cero emisiones netas. Es vicepresidente del Comité de Finanzas Sostenibles de la Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles y tiene más de 15 años de experiencia en el sector de servicios financieros, especialmente en el análisis de mercados accionarios, banca corporativa, financiamiento corporativo y gestión de riesgos, y ha atendido a clientes de toda una variedad de sectores y países, en su mayor parte en Latinoamérica y Estados Unidos. Daniel posee una maestría en Administración de Empresas de INCAE Business School y un Certificado de Financiamiento Sostenible de Inversión ASG de la Stern School of Business de la Universidad de Nueva York.
Y también estuvo recientemente representando a Scotiabank en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Biodiversidad COP16, un evento internacional que se llevó a cabo en la ciudad de Cali, Colombia y que contó con una participación histórica de más de 500 mil asistentes que estuvieron haciéndose seguramente estas preguntas que vamos a tratar de resolver el día de hoy. Sin más preámbulos, Daniel, buenos días, buenas tardes, buenas noches, y bueno, comencemos con ¿Qué es el financiamiento sostenible y qué tipo de transacciones entran en esta categoría?
Daniel Gracian (DG): Muy buenos días Camilo, bueno, el financiamiento sostenible involucra el proceso de considerar factores ambientales, sociales y de gobernanza ASG al tomar decisiones de inversión y financiamiento, esto incluye considerar proyectos que tengan acciones para la mitigación y adaptación al cambio climático, como también la protección de la biodiversidad, consideraciones sociales como, por ejemplo, reducir la desigualdad y fomentar la inclusión, y una gobernanza adecuada que puede incluir relaciones con los empleados, entre otros. Aquí la clave es vincular la estrategia de sostenibilidad de la entidad con la estrategia financiera y la estructura de capital, y estas estructuras y transacciones de financiamiento sostenible pueden aplicarse a muchos instrumentos, incluyendo bonos y préstamos verdes, sociales y sostenibles, así como también préstamos, bonos, depósitos, derivados, titulizaciones, vinculados a indicadores sostenibles. La verdad es que cada vez hay más instrumentos financieros que pueden incluir este tipo de características sostenibles.
CH: Bueno, Daniel, ha sido clara su respuesta, pero quiero concentrarme en el tema de la sostenibilidad, que es todo, no solo medio ambiente, sino también implica un componente social como usted mismo también lo referenciaba al inicio de esta conversación. ¿Cómo hacemos esa diferenciación, Daniel, entre las finanzas sostenibles que tienen componentes sociales y el financiamiento verde? Es seguramente un tema que nos preocupa a muchos, pero del que no sabemos diferenciarlo.
DG: Claro, tal vez empezamos con el financiamiento verde. Este está específicamente relacionado con proyectos que buscan tener un impacto ambiental positivo. Estos proyectos suelen estar dirigidos a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero o facilitar la transición hacia fuentes de energía de menor emisión, como los proyectos de energía renovables, que son lo más claros.
Pero también consideran financiamientos para proyectos de economía circular, edificios verdes y muchas otras categorías que pueden traer un impacto medible y que garanticen beneficios ambientales. Por otro lado, como bien indicas, el financiamiento sostenible también puede tener componentes sociales. Y aquí lo importante es que exista una población meta que se va a ser beneficiada por el proyecto social.
Entonces, muchos de estos financiamientos están dirigidos a proyectos que ayuden al acceso de servicios básicos, como por ejemplo hospitales, centros educativos, también proyectos identificados para el acceso a infraestructura básica, como por ejemplo agua potable y transporte, o temas que apoyen la equidad de género, empleo o la vivienda asequible. Y especialmente en América Latina, este componente social es sumamente importante.
CH: Daniel, pero ¿cómo se percibe el desarrollo justamente de las finanzas sostenibles en América Latina en comparación con otras regiones? ¿Cuáles son esos principales desafíos y oportunidades? Usted estuvo presente en uno de los eventos más importantes a nivel mundial que tocó justamente esos temas y nos gustaría conocer cuál es esa imagen que se tiene sobre esa percepción del desarrollo de las finanzas sostenibles en esta región tan importante.
DG: Claro, yo creo que es una pregunta muy importante, porque en realidad América Latina es una de las regiones con mayor crecimiento en finanzas sostenibles. En el 2023, por ejemplo, el mercado financiamiento sostenible en la región creció cerca de un 30% en comparación con el año 2022, mientras que las cifras globales se mantuvieron relativamente estables durante este mismo periodo, demostrando que en la región hay un apetito muy grande por las finanzas sostenibles. Es decir, hay un crecimiento en volumen más importante en la región que a nivel mundial, y eso pues es bastante claro.
También vemos una diferencia importante en tipo de instrumento. Entonces, a nivel global, más del 50% de la deuda sostenible es verde, es decir, enfocado en proyectos ambientales, mientras que lo que llevamos de este año en América Latina, casi el 70% de la deuda sostenible tiene un componente social, muy ligado a la pregunta anterior que me hiciste. Además, algo importante es que la emisión de bonos vinculados a la sostenibilidad, o SLBs por sus siglas en inglés, es decir, bonos que tienen indicadores ambientales o sociales, ha evolucionado muchísimo en la región como una herramienta importante para ayudar a financiar la transición hacia una economía baja en carbono, y es uno de los mercados más activos en la emisión de este tipo de instrumentos.
El año pasado, aproximadamente el 20% de todas las emisiones etiquetadas en la región fueron de este tipo, SLBs, mientras que, a nivel mundial, solo el 5% fueron de este tipo. Y en realidad, no solamente estamos viendo un aumento en el interés por estos instrumentos de préstamo en la región, sino que también estamos viendo mucha innovación en finanzas sostenibles. Y a mí siempre me gusta decir y recalcar que la verdad es que América Latina es un centro para innovación de las finanzas sostenibles a nivel mundial.
Esta región fue pionera en la emisión de bonos soberanos vinculados a la sostenibilidad, se vieron uno de los primeros en desarrollar una taxonomía sostenible incluyendo criterios sociales. Somos un gran impulsor como región del financiamiento hacia la economía azul, no solamente en América Latina, en el Caribe también. Y también hemos visto muchos canjes de deuda por naturaleza o debt for nature swaps, que, aunque es un instrumento que se vio ya hace muchos años, está volviendo a verse en América Latina.
Entonces, esto en realidad, Camilo, presenta una oportunidad para nosotros como Banco Global. Y nuestro grupo de financiamiento sostenible ha trabajado mucho para convertirnos en un líder en finanzas sostenibles en América Latina, con un equipo en realidad enfocado específicamente en la región, lo cual para nosotros es un importante diferenciador que nos permite crear muchísimo valor a nuestros clientes. Y ahora, hacia adelante, vemos un crecimiento similar.
La verdad que creo que las finanzas sostenibles están aquí para quedarse y más bien van a seguir aumentando. Evidentemente, respaldado con algunos esfuerzos que ya estamos viendo en el mercado, como por ejemplo, uno, una mejor divulgación de información sostenible y la alineación con los estándares internacionales, como por ejemplo, el Consejo de Normas Internacionales de Sostenibilidad, o ISSB, por sus siglas en inglés, ya que esto brinda mayor transparencia y comparabilidad para los inversores.
Número dos, también estamos viendo esfuerzos y compromisos continuos de los soberanos, es decir, los gobiernos, en emitir deuda sostenible para financiar agendas nacionales de sostenibilidad, un aspecto muy importante, especial para nuestra región.
Número tres, también estamos viendo una mayor planificación de la transición, por parte del sector empresarial, a medida que articulan aún más las vías de implementación hacia sus objetivos de descarbonización.
Finalmente, número cuatro, como dije anteriormente, la innovación de productos es parte clave, con especial atención a la financiación de la transición hacia una economía con bajas emisiones de carbono, soluciones de finanzas mixtas, o blended finance, en inglés, la economía azul, como dije, y evidentemente, muy relacionado a lo que vimos en COP16, la biodiversidad.
También, para que el mercado pueda seguir desarrollándose, y estos cuatro ejes que acabo de comentar se puedan implementar, sí es importante generar mayor conciencia sobre los temas de sostenibilidad en todas las industrias, y fortalecer las alianzas entre los gobiernos, las organizaciones multilaterales y las asociaciones del sector privado, esto sí va a ser clave también para que se pueda seguir desarrollando el mercado de finanzas sostenibles en la región.
CH: Daniel, no lo quiero despedir sin preguntarle de qué manera estas finanzas sostenibles pueden impulsar el desarrollo económico y social en los países latinoamericanos, teniendo en cuenta que las realidades socioeconómicas y ambientales de la región son diversas y conllevan una serie de ambiciosos proyectos a largo plazo.
DG: Claro, es una pregunta interesante, porque en realidad en las finanzas sostenibles es muy importante el contexto local, como bien mencionas, y la realidad es que hemos visto a primera mano que las finanzas sostenibles sí pueden ayudar a canalizar más capital hacia proyectos sostenibles e incentivar impactos ASG positivos en América Latina, especialmente de abordar los desafíos socioeconómicos y ambientales de la región, específicamente. Por ejemplo, hemos visto casos donde se ha logrado impulsar inversiones en infraestructura verde, energía renovable y agricultura sostenible, y al mismo tiempo generando empleos y estimulando el crecimiento económico, cuando al final también reducimos emisiones de gases de efecto verdadero, contribuimos a la conservación ambiental.
También hemos visto capital que se ha logrado direccionar hacia iniciativas públicas y privadas que promueven la equidad social y la inclusión, como por ejemplo el financiamiento para la educación, la salud, los derechos humanos, y además también es cierto que a través de este tipo de financiamiento se puede reducir el costo de la deuda para empresas privadas y entidades públicas que cumplen con ciertos objetivos sostenibles preestablecidos, y esto permite tener un mayor flujo de caja y capital de trabajo también para generar más negocios o invertir en iniciativas locales y sociales.
CH: Bueno, como pudimos darnos cuenta, América Latina es un gran propulsor del financiamiento sostenible. Daniel nos ha dado un gran esbozo de todos los desafíos en materia de financiamiento sostenible y en todo el tema estratégico que no solamente compromete al empresariado, sino también a los gobiernos y a todas las personas. Finanzas sostenibles están para quedarse, temas de gobernanzas, planificación de la transición del sector empresarial, incluso temas relacionados con la economía azul y la biodiversidad que tanto se tocaron en la COP16. Daniel Gracian, quien lidera la labor de financiamiento sostenible de Scotiabank en Latinoamérica y el Caribe, muchas gracias por estar con nosotros en este espacio de ¿Hacia Dónde Vamos?
DG: Gracias por la invitación, Camilo.
CH: Y a ustedes nos vemos en una próxima oportunidad para que juntos podamos descubrir hacia dónde vamos.